Enviado: dom,31 enero, 2010 17:45
Asunto: Desaparición de la MANDRÁGORA. Y otros.
Distinguidos Señores Oliart y González
Me permito dirigirme a ustedes, para exponerles mi opinión sobre la desaparición de LA MANDRÁGORA de la programación de Televisión Española.
Esta supresión ha supuesto una abrupta interrupción informativa entre el mundo de las Artes Escénicas -tan falto de conexiones a través de la pantalla-, y la audiencia televisiva; y también con la propia comunidad artística y su público.
La abismal diferencia de tiempo entre el que se dedica al deporte en general -y al fútbol en particular-, en los informativos y la programación de TVE , y el tiempo que se dedica al mundo de la cultura, resulta un tremendo agravio comparativo para los que pertenecemos a la comunidad artística y escénica.
Sin embargo, los trabajadores y creadores de esta comunidad, proporcionan al resto de la sociedad una producción mucho más enriquecedora y "nutritiva", hablando en términos de beneficio social. Y si bien estos beneficios son difíciles de detectar según los índices convencionales, o se producen a más largo plazo, no cabe duda de que se trata de una producción necesaria para nuestra Cultura.
En LA MANDRÁGORA se hablaba de personas y acontecimientos del mundo de la creación escénica, que no van a encontrar reflejo en otros formatos.
A todos nos ha sorprendido y disgustado que, tras tantos años siendo un referente televisivo, se haya suprimido inopinadamente.
Nuestra televisión pública debería atender a los temas Culturales -y sobre todo los menos "mediáticos", como son el Teatro o la Danza-, con especial cariño, énfasis e interés.
Quede aquí constancia de mi discorfomidad y del rechazo que siento hacia esta supresión, así como de mi deseo de que sea remediada del mejor modo posible y en el menor tiempo posible.
Asimismo, y aprovechando este escrito, me gustaría sugerirles que consideren la posibilidad de incorporar de nuevo al repertorio de programas dramáticos que ya se emiten en TVE, algunos formatos que tengan algo más de exigencia y ambición literaria.
Me consta que son varias las series dramáticas que actualmente se están emitiendo con muy buena audiencia y creo que, en general, esto es muy positivo y les felicito por ello.
Pero también creo que la televisión pública tiene el deber de poner en contacto a los espectadores con la obra de nuestros principales autores, ya sea de textos dramáticos o bien pertenecientes a nuestra riquísima y extraordinaria narrativa.
También en la cuestión de las distintas lenguas del Estado sería muy positivo que RTVE hiciera una labor de difusión y acercamiento.
En lugar de ser consideradas como patrimonio común de diversidad y riqueza, el encono que existe por parte de algunos sectores de nuestra sociedad hacia otras lenguas que no sean la propia (en especial la castellana), es hoy día un terrible déficit en nuestro entorno cultural.
A mi modo de ver, el desconocimento y la inseguridad ante lo que no entendemos, es uno de los factores que más pueden influir en el recelo y consiguiente intolerancia de algunos conciudadanos.
Los niños son nuestro futuro y tal vez ahí esté la clave: una generación que conociera, o tuviera rudimentos, de las otras lenguas de su país, sería una generación más abierta, más tolerante, más libre. Y con mayor facilidad para aprender idiomas y estructurarse con patrones de diversidad.
Disfrutaría la diferencia en lugar de temerla. Ojalá TVE pudiera y quisiera acometer ese reto.
Agradeciendo de antemano su atención, les saludo y me pongo a su disposición para cualquier propósito que crean oportuno.
Vicky Peña Carulla
Actriz
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